El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, apeló directamente al líder de la guerrilla izquierdista colombiana Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda, pidiéndole la liberación de sus rehenes.
El mandatario se refirió, en especial, la candidata presidencial Ingrid Betancourt, una colombiana que posee la nacionalidad francesa.
Mensaje íntegro "En este momento Marulanda, una mujer en peligro de muerte debe ser salvada", dijo Sarkozy al comandante de las FARC, conocido también como "Tirofijo".
"Solicito solemnemente la liberación de Ingrid Betancourt", agregó el mandatario en el mensaje televisivo.
El presidente de Francia, un conservador de 52 años que asumió la presidencia el 16 de mayo, se manifestó dispuesto a involucrarse más en la búsqueda de un acuerdo humanitario entre el Palacio de Nariño y la guerrilla.
Betancourt fue secuestrada por las FARC hace casi seis años, el 23 de febrero de 2002, apenas tres días después de que el gobierno de Andrés Pastrana diera por terminado el proceso de paz que adelantaba con ese grupo guerrillero.
Junto a Betancourt también fue secuestrada su compañera de fórmula Clara Rojas, quien aspiraba a la vicepresidencia.
A finales de noviembre, el ejército colombiano reveló una "prueba de vida" de Betancourt, un video en el que se la ve demacrada y con semblante triste.
En dos mensajes, uno televisivo y otro radial, Sarkozy dijo a los guerrilleros que no corran el riesgo de que Betancourt muera en cautiverio.
"Tengo un sueño: ver a Ingrid con los suyos esta Navidad", dijo.
La intervención del mandatario francés llega días después que el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, ordenara la reanudación de los esfuerzos en pos del acuerdo humanitario reclamado por familiares de cientos de rehenes.
El martes, Uribe y el alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, manifestaron sus deseos de que Francia acompañe en el proceso.
La interpelación directa de Sarkozy a Marulanda, y su mensaje a Betancourt a través de Radio Francia Internacional parecería ser la respuesta del Elíseo.
Sin embargo, como señala el diario colombiano El Tiempo, algunos analistas perciben que el papel que podría desempeñar Sarkozy se vería limitado por el rótulo de "colaborador" que le dio Bogotá.
Los últimos esfuerzos de mediación en este proceso, encabezados por el presidente Hugo Chávez y la senadora colombiana Piedad Córdoba, se frustraron cuando Uribe los desautorizó tras un desacuerdo respecto al protocolo.
Esto desencadenó luego la "congelación" de las relaciones entre Caracas y Bogotá por parte de las autoridades venezolanas.
Acuerdo escurridizo
El gobierno colombiano se ha mostrado dispuesto a "negociar" el canje de unos 40 rehenes de "alto perfil político" por guerrilleros presos, bajo condición de que estos últimos se comprometan a abandonar la lucha armada.
Las autoridades han solicitado a las FARC que le envíe una lista de los guerrilleros presos que quieren canjear por medio centenar de políticos, militares, policías y otros rehenes, entre ellos tres estadounidenses e Ingrid Betancourt.
Los familiares de Betancourt, especialmente su madre y sus hijos, han organizado campañas piden la libertad de los secuestrados desde países tan distantes entre sí como Australia, Canadá, Francia, Costa de Marfil, y por supuesto Colombia.
Según la Fundación País Libre, en ese país hay 3.181 personas secuestradas por diferentes grupos.
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