MADRID.- Luciano Pavarotti fue el tenor italiano más universalmente popular de la segunda mitad del siglo XX. Nació el 12 de octubre de 1935 en
Módena (Italia), en el seno de una familia de panaderos. Su padre le trasmitió el amor por la ópera, y pronto formó parte del coro del Teatro de la Comunna en su ciudad natal y en la Coral Gioacchino Rossini. Falleció hoy 6 de septiembre en Módena, a los 71 años.
En 1955 empezó a dar clases de canto con Arrigo Polo y Ettore Campogalliani, y antes de dedicarse profesionalmente a la ópera se licenció en Magisterio y
trabajó en la enseñanza durante 12.
Debutó en 1961 en el Teatro Reggia Emilia, con el Rodolfo de 'La bohème', de Puccini, y, fuera de Italia, en Dublín, con el duque de Mantua de Rigoletto, y dos años después actuó en Amsterdam, Viena, Zurich y Londres hasta recalar en La Scala de Milán con motivo del centenario de Arturo Toscanini. En 1965 enfocó su carrera hacia el belcantismo y formó dúo con la soprano australiana Joan Sutherland, a la que conoció en Dublín, para interpretar obras de Bellini y Donizetti en EEUU.
En 1966 se consolidó internacionalmente en el Teatro Covent Garden de Londres, donde le fue concedido el título de
"Rey de la octava do" y
"Rey del do agudo" y, seis años más tarde, se consagraba definitivamente en la Metropolitan Opera House de Nueva York con la producción de 'La fille du régiment' de Donizetti.
El tenor del pueblo
Su luminosa, resonante e inconfundible voz en las interpretaciones de Nemorino del L'Elisir d'Amore, Ernani de Verdi, Radamés de Aída, el príncipe Calaf del Turandot y Otello de Verdi, lo convirtió en uno de los grandes tenores contemporáneos y el mejor pagado de la historia. La transmisión televisiva de 1977 'En vivo desde el Met' situó a Pavarotti ante la mayor audiencia en la historia de las óperas televisadas.
Se ganó el cariño del gran público con los
recitales multitudinarios de "Los tres tenores", junto a Plácido Domingo y José Carreras, a medida que perdía el favor de los círculos minoritarios operísticos.
Los conciertos con motivo de los
Mundiales de Fútbol de 1990, en las Termas de Caracalla (Roma), de 1994 en el Doodger Stadium de Los Ángeles, y de 1998 bajo la Torre Eiffel, en París, supusieron un éxito sin precedentes en popularidad y recaudación. En 2001 conmemoró en el Teatro Comunale de su Módena natal su 40 aniversario en la música y cantó las principales obras de su repertorio, acompañado por 16 artistas líricos.
Su último disco, 'Ti adoro' (2003), fue su primera incursión en el repertorio no operístico tras 15 años sin grabar un álbum. Sus grabaciones incluyen colecciones de arias y recitales, un concierto en vivo en el Carnegie Hall y antologías de canciones napolitanas e italianas. En 2004 actuó en España con motivo de los actos del Año Santo Compostelano, dentro del Festival Internacional de Música de Galicia,en la Plaza del Obradoiro de Santiago, y cerró el año debutando en la dirección operística de 'La bohème' de Puccini en el Teatro della Fortuna de Fano, en la costa adriática.
Pavarotti, figura clave en la popularización de la ópera, está en posesión de un Grammy al mejor cantante clásico (1991) y el Premio Libertad de la City de Londres y la Cruz Roja por Servicios a la Humanidad, ambos en 2005. Su nombre aparece en el Libro Guinness Record por la cerrada ovación de una hora y siete minutos que le tributó la Opera de Berlín en 1988.
Una salud delicada
A lo largo de su trayectoria ha colaborado con cantantes como
Sting, Bono (U2) y Brian Adams. También ha impulsado las carreras de jóvenes cantantes, ha organizado conciertos benéficos, como el 'Pavarrotti & Friends', ha protagonizado la película "Yes, Giorgio" (1982) de Franklin J. Schaffner, en la que interpreta canciones como 'If We Were in Love', que fue nominada al Oscar, y 'I Left my Heart in San Francisco'.
En 1982 publicó su autobiografía 'Mi propia historia', escrita en colaboración con William Wright, y existe otra biografía suya, 'El rey y yo' (2004), llena de chismes y malicia contados por sus autores, el ex manager Herbert Breslin y la periodista y crítica Anne Midgette. En 2005 anunció su inminente retirada de los escenarios para dedicarse a su familia e impartir clases de canto.
Sin embargo, en 2006 hizo una gira mundial, que hubo de romper a finales de junio, sin llegar a actuar en Reino Unido, para ser operado de un
cáncer de páncreas, intervención que le fue realizada esos días en Nueva York.
Debido a esta convalecencia, el tenor se vió obligado a cancelar los conciertos que tenía programados para el 2006 dentro de su 'Worldwide Farewell Tour' (Gira de despedida mundial) tras anunciar unos meses antes su retirada de los escenarios, y que le iban a llevar ese septiembre a Austria, Finlandia, Noruega, Portugal y Suiza.
Muchos años atrás, en 1975, Pavarotti tuvo otra experiencia que hizo peligrar su vida, a su regreso de EEUU, cuando el avión que aterrizaba en Milán se partió en dos en la misma pista.
Durante los festejos del Día de Moscú, en septiembre de 2006, el tenor español José Carreras anunció en conferencia de prensa el deseo de Luciano Pavarotti, Plácido Domingo y el suyo de hacer una actuación de despedida en la Plaza Roja, y que ha ido quedando aplazada desde entonces.
Gran aficionado al fútbol, la pintura y los caballos es padre de cuatro hijas, las tres primeras —Lorenza, Cristina y Giuliana— fruto de su matrimonio con Adua Veroni, y la última, Alice, nacida de su relación con su segunda esposa y ex secretaria Nicoletta Mantovani, con quien se casó el 13 de diciembre de 2003 tras casi 40 años de vida conyugal con Adua.
Actualizado jueves 06/09/2007 07:06
Fuente: Diario El Mundo de España