La Asociación de la Prensa Uruguaya quiere manifestar preocupación y alerta por una sucesión de casos ocurridos en los últimos días, tanto desde ámbitos públicos como privados, que afectan en diverso grado la libertad de expresión y el derecho al trabajo de periodistas:
1.- Ha tomado estado público que una investigación del periodista César Bianchi del suplemento Qué Pasa del diario El País, fue objeto de censura al interior de la empresa El País S.A. El informe censurado hacía referencia a la actividad del contratista Francisco Casal y su empresa Tenfield, titular de los derechos de televisación del fútbol uruguayo.
El informe llevaba varios meses de trabajo y estaba prevista su publicación para el sábado 18 de agosto, pero no pudo ver la luz por una decisión al más alto nivel empresarial. Se trata de un caso grave de censura sobre asuntos de interés general, esta vez proveniente desde el propio ámbito empresarial.
Estas prácticas violentan la libertad de expresión del periodista y el derecho a la información de los ciudadanos, dado que por la amplitud del informe censurado no se puede justificar en la autonomía editorial.
Estas prácticas impactan directamente en el periodista víctima de censura y en el resto de los colegas que trabajan en dicha empresa, debido a que puede derivar en autocensura.
2.- La APU ha constatado que la periodista Karina Caputi que trabaja en radio FM Conquistador de Treinta y Tres, enfrenta un clima de hostigamiento, que incluyeron presiones en su lugar de trabajo. Se trata de descalificaciones a su trabajo profesional realizada por parte de algunos ediles y un clima de enfrentamiento por parte de integrantes del Ejecutivo comunal.
Llama la atención en aquel departamento la costumbre casi institucionalizada de presionar a través de la solicitud de grabaciones, práctica que es casi diaria según expresión de los propios colegas olimareños.
La APU ha realizado gestiones ante el propietario de la radio y ante el propio intendente Amaral, a los efectos de advertir que las interferencias en el trabajo profesional y las presiones, son formas de censura indirecta. En adelante, el sindicato seguirá este caso de cerca.
3.- El periodista Ignacio Alvarez denunció una amenaza contra su integridad física, producida luego de que en radio Sarandí diera a conocer un informe sobre publicidad engañosa. Este tipo de amenaza también forman parte del elenco de presiones y ataques a la libertad de prensa, porque no sólo afectan sicológicamente al periodista víctima, sino que buscan amedrentar a quienes investigan sobre asuntos que afectan a la sociedad toda.
Montevideo, 11 de setiembre de 2007
Consejo Directivo Central de la
ASOCIACION DE LA PRENSA URUGUAYA
No hay comentarios:
Publicar un comentario